En 2014, inició en Venezuela una de las peores crisis de su historia. La caída de los precios del petróleo y algunas decisiones del gobierno de Nicolás Maduro, generaron hiperinflación, una masiva migración, escasez y un estado de malestar generalizado.
La crisis en Venezuela, también afectó el terreno político, ya que una gran cantidad de venezolanos, comenzó a tener inconformidad con la gobernabilidad del chavismo; esto se reflejó en las manifestaciones de 2014, 2017 y 2019.
En medio de un tenso clima político, la oposición venezolana y las fuerzas militares de Venezuela, protagonizaron una lucha sangrienta en las calles que dejó centenares de fallecidos.
Venezuela ha vivido un escenario apocalíptico, con luchas en las calles, colas para adquirir alimentos, personas comiendo de la basura, escasez de medicamentos y una gran cantidad de familias separadas por buscar un mejor futuro fuera de las fronteras.
Según la Oficina de la ONU para los Refugiados (ACNUR), 5.6 millones de venezolanos han dejado su país.
Pese a que Venezuela ha mostrado mejoras económicas en los últimos meses, aún muchos ciudadanos viven alejados de los umbrales de calidad de vida.
La BBC cita un estudio del profesor de la UCAB, Luis Pedro España, que indica que el nivel de pobreza llegó a su tope máximo (94,5 %) en septiembre de 2021.
El mismo estudio que se basó en la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida (Encovi), arrojó que el 76, 6 % de los venezolanos vive en la pobreza extrema.
El salario mínimo en Venezuela aumentó en marzo de 2022 a 130 bolívares ($ 23 dólares). Antes del incremento, el pago mínimo del trabajador se ubicaba en $ 2,38 dólares , información extraída de Wikipedia.
Para mayo de 2022, la canasta básica familiar en Venezuela se ubicó en un valor de $ 477,52 dólares.
En Venezuela se necesitan 20 salarios mínimos para poder cubrir los gastos de la canasta familiar. En otras palabras, una familia de cinco personas necesita ganar 20 veces el salario mínimo para cubrir sus necesidades básicas.
El sector privado en Venezuela ofrece salarios que puede cuadruplicar el sueldo mínimo, incluso existen trabajos con pagos superiores, pero no todos tienen acceso a estas fuentes de trabajo.
La Biblia indica que el Señor ha disciplinado al pueblo por alejarse de él y preferir vivir en el pecado.
También las Sagradas Escrituras muestran que Dios ha castigado a los pueblos de líderes que pecaron contra Dios.
Sin embargo, Dios tiene un plan perfecto el cual incluye la disciplina. Proverbios 3:11-12 dice: “Hijo mío, no desprecies la disciplina del Señor, ni te ofendas por sus reprensiones. Porque el Señor disciplina a los que ama, como corrige un padre a su hijo querido”.
Un ejemplo del castigo de Dios aparece en el Antiguo Testamento, cuando Dios incineró a Sodoma y Gomorra.
Ambas ciudades fueron calcinadas por Dios, ya que estaban habitadas por hombres perversos.
Solo Lot y su familia, por ser buenos, tuvieron la oportunidad de escapar del castigo de Dios. En el proceso la mujer de Lot quedó convertida en una estatua de sal, ya que desobedeció el mensaje de los ángeles de Dios: “No miren hacia atrás”, informa JW.
Otro caso de reprimenda del Señor lo encontramos en 1 Crónicas 21:1-17. David decidió censar al pueblo de Israel, orden influida por Satanás. Pese a ser advertido por el general Joab de que esta decisión no agradaría a Dios, el rey no hizo caso.
David se arrepintió y le pidió disculpas al Señor. Dios le dio a escoger entre tres opciones de castigo: “Tres años de hambre, o por tres meses ser derrotado delante de tus enemigos con la espada de tus adversarios, o por tres días la espada de Jehová, esto es, la peste en la tierra, y que el ángel de Jehová haga destrucción en todos los términos de Israel”.
El evangelista de Puerto la Cruz, Venezuela, Carlos Urbaneja, comentóque la crisis que se ha desatado en su país tiene una causa espiritual.
“Hay un mundo espiritual que es real. Este mundo espiritual se mueve, y lo que está sucediendo en Venezuela tiene que ver con esto…”, expresó.
El evangelista indicó que Venezuela gozaba de una buena economía, pero decayó porque muchas personas le dieron la espalda a Dios.
El líder religioso atribuyó parte de la responsabilidad de la crisis a las iglesias venezolanas, ya que muchos pastores emigraron en medio de los problemas de Venezuela, mientras que otros se dedicaron a hacer política.
Por su parte, el pastor Arturo Noriega manifestó que tiene fe en que puede ocurrir un cambio positivo en el país.
“Dicen las escrituras que más vale perro vivo que león muerto. Mientras tengamos vida hay esperanza”, expresó el pastor.
Asimismo, el líder religioso explicó que mientras existan personas predicando el evangelio en Venezuela puede ocurrir un cambio positivo.
“(…) Mientras prediquemos el evangelio y lo pregonemos a cada rincón de la nación, que veo que muchas iglesias están trabajando por eso el día de hoy, va a haber el cambio. Porque esta nación se sostiene por el clamor de la iglesia que todavía existe en esta nación (…) Por eso los juicios no son más grandes para este país, por eso tenemos esperanzas de que puede haber un cambio”, manifestó Noriega.
