Este es la hermosa experiencia de Tecla miceli quien fue diagnosticada con melanoma multiple un tipo de cancer de las celulas de la medula osea, se considera una enfermedad incurable. Pero su fe y una oración ferviente a Dios fue sana de esta terrible enfermedad.
Tecla ademas de origen italiano se mudó a los estados Unidos muy joven sus padres la criaron en un hogar completamente catolico, pero tuvo su encuentro más íntimo con Jesus por medio de sus dos hijos, Gary y Laura quienes eran parte de una iglesia evangélica en California
Tambien la mujer cuenta como fue su experiencia la primera vez que acudió a la iglesia junto a sus hijos «Acepté a Cristo, pero no entendí lo que había estado haciendo. Llegué a casa. Nunca deseé volver a pecar«
Tecla fue diagnosticada con cáncer en etapa inicial, decidió no hacer quimioterapia, sin embargo, después de 3 años los médicos notaron un aumento alarmante en las células cancerosas.
«Durante mi enfermedad, mi hija Laura oró conmigo todos los días y me dio palabras que aumentaban mi fe en Jesús»
La mujer cuenta como una noche hizo una oración sincera que venia desde lo mas profundo de su corazón
«Sé que lo hice todo: estoy casada, tengo hijos, nietos, terminé la universidad, pero aún no estoy preparada para morir. Si me curas, contaré mi testimonio a todo aquel que me quiera escuchar»
Tecla cuenta que cuando se fue a dormir un dia antes de ir al medico tuvo un sueño que la impacto
«Yo colgaba de un acantilado muy alto y estaba a punto de caer, pero una mano firme y grande la dirigió con seguridad hacia el suelo y la libró de la muerte».
«Una vez que pisé el suelo, lloré porque sentí que había sido un milagro», explicó. Cuando me convencí, en el sueño, ella empezó a anunciar a Jesucristo al público.
El dia siguiente Tecla sintió una paz como nunca antes y fue al hospital donde los médicos se encontraban confundidos ante lo que estaban viendo en la nueva evaluación de la mujer
El médico explicó los resultados a la mujer: «Su evaluación previa tuvo un resultado de 27-32, es decir, un cáncer. Sin embargo, en esta prueba, la tasa volvió a 5 o 6. Eso no tiene sentido. Plasma sanguíneo nunca se retrae, Esto debe ser un error del laboratorio», expresó moviendo la cabeza con incredulidad.
La mujer explico al médico lo que había vivido una noche antes el medico asombrado le expreso «En 25 años de práctica nunca había visto algo así antes». A partir de ese instante, todas las evaluaciones sugirieron la ausencia de cáncer. «Esto es un milagro»
