Este joven sobrevivió a un terrible accidente dentro de un jardín ha exaltado a Dios por mantenerle con vida y cuidarle aun en el peor momento de su última, el cual pudo haber sido el último.
Logan Schneider de 19 años, trabajaba en la granja de cerezo de sus padres manejando un tractor en uno de los huertos de la propiedad, y cuando creyó que su trabajo estaba completado un helicóptero golpeó las líneas eléctricas aéreas y se estrelló justo donde él estaba.
«Estaba atrapado contra el volante, atrapado con la parte delantera del helicóptero justo detrás de mí», explicó Schneider para el canal King5, en Washington.
Éste mientras trabajaba usaba auriculares con cancelación de ruido y por eso no pudo darse cuenta del helicóptero sino cuando alzó su vista e inmediatamente fue golpeado, “Miré hacia arriba y ahí fue cuando lo vi. Tan pronto como lo vi caer sobre mí, dije: ‘Oh, no, esto me va a golpear’”, Afirmó.
Cuando logró liberarse, éste también ayudó a rescatar al piloto del helicóptero, Cori Johnson, el cual estaba colgando boca abajo solamente de su arnés gritando por ayuda, pues era el único a bordo; los bomberos llegaron a controlar el incendio de ese elemento y el tractor también.
«Lo escuché gritar. Miré y lo vi colgado boca abajo. El fuego estaba en todas partes. Cuando estaba en el momento, realmente no estaba pensando. Solo estaba haciendo», explicó.
Afortunadamente ambos no tuvieron heridas graves sino algunas muy ligeras que fueron tratadas con ayuda médica; el joven de 19 años solo tuvo una quemadura, lo que él califica como increíble por lo que implica ser impactado por el peso de un helicóptero.
«Es uno en un millón, diría yo», dijo Logan.
Y las cosas inesperadas siguieron pasando luego de descubrir que él y el piloto compartían la misma fecha de cumpleaños, el cual celebró con una nueva oportunidad de vida después de tan aparatosa experiencia.
Schneider quien se acababa de graduar de secundaria explicó que su sueño de ser piloto se mantiene aun después del incidente que vivió y su seguridad es infundada por Dios, de quien aseguró estar protegiéndolo siempre.
“Todavía quiero ser piloto. Siento que siempre tengo a alguien cuidándome, Dios está cuidándome, protegiéndome. Y nunca sabes cuándo podría ser tu último momento”, aseguró para finalizar un testimonio de la protección y el cuidado del Señor.
Hay cosas que suceden en nuestras vidas, en los que realmente Dios mete su mano y nos protege, esta vez fue el quien testificó, el proximo seremos nosotros quienes tambien daremos cada dia gloria y honra a quien la merece.
