De manera que podemos decir confiadamente: El Señor es mi ayudador; no temeré lo que me pueda hacer el hombre. Hebreos 13:6
La desconfianza en Dios también es una pandemia. Tal vez de boca digamos que confiamos en Dios, pero eso se demostrará en momentos difíciles.
Anteriormente a este versículo 6 de Hebreos 13, cabe citar el versículo 5 que dice: Sean vuestras costumbres sin avaricia, contentos con lo que tenéis ahora; porque él dijo: No te desampararé, ni te dejaré.
Aquí nos manda a que no seamos ambiciosos en nuestras costumbres. También nos dice que estemos contento. Al hacer esto que nos manda la palabra de Dios, estaremos practicando lo que dice y a la vez demostraremos plena confianza en Dios. Debemos estar contento y sin avaricia.
Ahora, cual es la razón de estar contento y no codiciar lo ajeno? El mismo versículo responde diciendo; «Porque Él dijo: No te dejaré, ni te desampararé»… Dios no te va a dejar, tampoco te desamparará, él nunca lo ha hecho. Solamente confía en él.
Por eso el versículo 6 dice; El Señor es mi ayudador; no temeré lo que me pueda hacer el hombre. Cuando sabes que el Señor es tu ayudador, está confiado sin temer lo que pueda hacer el hombre. Pero debemos decirlo confiadamente como dice el versículo 6.