Y algo que quizás no sabías, es que la vejiga promedio tiene la suficiencia para retener alrededor de 8 vasos de agua, y también que la pared de la vejiga está llena de pequeños receptores que manda un mensaje a nuestro cerebro cuando alcanza su máxima capacidad.
Mencionaremos algunas de las consecuencias que se pueden dar, por retenernos cuando no orinamos. Veamos;
- La Cistitis intersticial: Esta se caracteriza por el apuro de orinar de forma frecuente y con urgencia, esta sensación suele producirse con dolor y molestia.
- Infección urinaria: Esto se produce por la acumulación de bacterias, cuando esperamos mucho tiempo sin orinar se acumulan diversas bacterias, lo que termina afectando nuestros cuerpos.
- Cálculos renales: Mejor conocidas como piedras, se producen en los riñones, causan mucho dolor ya son cristales sólidos que se forman en el riñón por sustancias que se encuentran en la orina. Se forman debido a una infección urinaria ocasionada por la falta de ir al baño.
- Pielonefritis: Es una infección del tracto urinario que inicia en la uretra o en la vejiga, pero si no se trata a tiempo puede causar daños graves al riñón. Una de las causas es la obstrucción del tracto urinario o por aguantarse las ganas de ir al baño.
- Reflujo vesico-uretral: Se produce cuando la orina vuelve a la uretra y riñones, lo que causa infecciones en el tracto urinario. Se produce por bacterias agrupadas por aguantarse las ganas de ir al baño.
- Un escape de liquido embarazoso.
- Debilitar el suelo pélvico.
- Molestias que no desaparecen.
- Vejiga dilatada.
- Infecciones.
Según los especialistas. Lo correcto es ir al baño cada 4 o 6 horas y también debes saber que si una vez te aguantas no pasa nada, pero si es de forma habitual, tendrá consecuencias nada favorecedoras.